SE DUEÑ@ DE TU PROPIA SALUD II
Descripción General del Programa: La Fuga: Incendia tu Cárcel y Reclama tu Corona
Admitámoslo. Tu vida no es del todo tuya. Es un collage de "deberías", "tienes que" y expectativas ajenas. Tus decisiones más importantes han sido dictadas por el miedo a decepcionar a otros. Tu personalidad es una máscara cuidadosamente construida para ser aceptado, amado o simplemente tolerado. Eres leal a un guion que te envenena, repitiendo los dramas de tu familia como una maldición, complaciendo a gente a la que ni siquiera le importas y viviendo dentro de unos límites que te asfixian. Eres un prisionero educado en una cárcel sin barrotes. Este programa NO es para encontrar tu mejor versión. Es para matar a la versión falsa. Es una conspiración, un motín, un plan de fuga perfectamente orquestado para liberarte de la programación que te ha convertido en un ciudadano modelo de tu propia miseria. Aquí no vienes a mejorar tu celda, vienes a quemarla hasta los cimientos.
¿Qué mierda vamos a hacer aquí? Primero, te convertiremos en un experto en demoliciones. Con el módulo de Creencias Limitantes, te daremos la dinamita para volar los muros mentales que has confundido con la realidad. Luego, desataremos a la bestia: resucitaremos a tu Adolescente Interior, esa fuerza de furia sagrada y autenticidad que reprimiste, para que su fuego arrase con toda la falsedad. Con ese poder recuperado, te entregaremos una espada y un escudo en el módulo de Límites, un entrenamiento de combate para que aprendas a defender tu reino y a decir "NO" como una declaración de guerra a todo lo que te roba la paz. Desde esa fortaleza, nos adentraremos en la cripta familiar para Curar el Alma de tu Linaje, cortando las cadenas kármicas que te atan a los destinos de tus ancestros. Finalmente, firmaremos un tratado de paz en la guerra más íntima, sanando tu relación con la Nutrición y tu cuerpo.
¿Y por qué carajo harías una mierda así?
Porque estás cansado de pedir permiso para vivir. Porque el resentimiento te está carcomiendo por dentro. Porque cada "sí" que dices queriendo decir "no" es un pequeño suicidio. Porque sospechas que tus problemas de dinero, de pareja y de salud no son mala suerte, sino los síntomas de esta esclavitud invisible. La Parte II es tu motín. Es el acto de mirar a tus carceleros —internos y externos— a los ojos y decir: "Se acabó. A partir de hoy, en este reino, mando yo".